VISITA AL MAESTRO J. CUELLAR

El pasado junio de 2017 tuve el placer de conocer a uno de los últimos alumnos directos del maestro Francisco Andrés Romero en Valencia/España. Hablamos largamente de las vivencias de aquella época, escuché a alguno de sus excelentes alumnos y rememoramos anécdotas de cuando mi padre estaba en plenitud de fama y pletórico de voz y de cuando Alfredo Kraus hizo las milicias en Valencia y llegó al Mtro. Andrés con muy poquita voz y todavía muy blanca por entonces, pero en pocos meses con dos clases semanales de media hora muy bien aprovechadas, su voz fue cogiendo timbre y sus agudos se fueron volviendo poderosos. En esa media hora, el trabajo principal era vocalizar e impostar y al final de la media hora cantaba una sola aria.

 

Alfredo Kraus (tenor) aria de Pescadores perlas

 

También hablamos del último alumno famoso del Mtro. Andrés el gran tenor Francisco Ortíz, tenor lírico spinto y actualmente gran profesor de canto también en Madrid, que tuvo la desgracia de perder al maestro Andrés, antes de que su voz hubiese cumplido el ciclo completo de impostación en máscara cuando tenía unos 20 años, pero a pesar de todo y el breve periodo y la buena técnica adquirida, le permitieron hacer una importante carrera mundial.

 

Francisco Ortiz (tenor) Recóndita Armonía

El maestro Cuellar es una gran persona, afable, cercano y de gran experiencia con la colocación de la voz de la época “dello squillo”, sus alumnos poseen voces timbradas y “arriba”, todos los que han pasado por su estudio, poseen su sello de la verdadera colocación del siglo XIX herencia del Maestro Francisco Andrés Romero.

Javier Boveda Aís (tenor) Tabernera del Puerto

También un excelente barítono joven que ahora está en el candelero de la lírica: MANUEL MAS hizo clases con el Maestro Cuellar, obsérvese el denominador común de voz en máscara y el timbre.

Manuel Más (barítono) La Traviata

El maestro Cuellar posee una memoria privilegiada para las anécdotas, hablamos largamente del gran tenor italiano Lauri Volpi, que se enamoró de una valenciana y al acabar su carrera se retiró a una preciosa villa en Burjasot, desgraciadamente ahora en ruinas y en venta, sin que la Generalitat Valenciana ni el ayuntamiento de Burjasot ofrezcan ningún interés histórico y cultural por conservar el legendario inmueble.

Reportage al tenor Lauri Volpi.

Todo lo contrario y gracias a Dios esto no sucede en Navarra y su pueblecito del Roncal en donde nació Julian Gayarre y donde su casa está restaurada y es como un santuario para todo melómano del canto con la obligada visita a su famosa y preciosa tumba a las afueras del pueblo.

El Mestro Cuellar nos narraba como grandes cantantes de la época se trasladaban a su palacete de Burjasot en busca de consejos y clases magistrales, su casa era un santuario para muchas voces que buscaban soluciones a sus problemas vocales como por ejemplo el gran tenor Franco Corelli, al que Lauri Volpi ayudó a conseguir la parte aguda de su voz que no poseía por naturaleza.

También Carlo Bergonzi mejoró con el Maestro Lauri Volpi su timbre inicial un poco entubado, por un timbre más nítido y brillante, en su discografía se aprecia notablemente esa evolución.

La gran sorpresa durante los relatos del Mtro. Cuellar fue, saber que el tenor Lauri Volpi conocía el trabajo y trayectoria del Maestro Francisco Andrés Romero, e incitaba a esos grandes cantantes del momento a hacer clases con él. Creo que nunca podremos saber las aportaciones de cada maestro hacia esos cantantes, pero de lo que si estoy seguro, es que el Mtro. Andrés que era en ese momento de la historia, un gran profesional de la impostación, con mucha experiencia y mucha paciencia y bondad personal, todos los ingredientes para un trabajo serio como es impostar la voz; aporto a esas figuras grandes beneficios vocales.

El Maestro Andrés en una entrevista elogiaba y agradecía las dotes pedagógicas de sus maestros de la siguiente manera:

-Díganos profesor, ¿qué recuerdos guarda usted de sus maestros?  ¡Son tantos los recuerdos! Como maestro de primeras letras tuve de canto a un gran cantante, a don Gabriel Hernández. De Harmonía y composición a don Francisco Antich; que era un pedagogo excepcional, tanto que, el que no lograba aprender con él, es porque era muy torpe. Como profesor de piano tuve a don José Lázaro, de todos guardo muy buen recuerdo.

¿Les considera decisivos en su formación? Desde luego el maestro Antich por ejemplo, fue decisivo en mi formación y en la de algunos músicos famosos, tales como Joaquín Rodrigo. Con Don Gabriel Hernández aprendí mucho también, aprendizaje que se vio completado por el que recibí de Don Lamberto Alonso, tenor y gran amigo al que admiro y admiraré siempre. También me sirvió de mucho mi gran amistad con una gran notabilidad tal como Salvatore Romano. En lo que a mí respecta. Añadiré que he tenido la suerte de encontrar los mejores maestros, los más caballeros, los más buenos.

El maestro Cuellar me relató los grandes recuerdos que tiene del Maestro Francisco Andrés Romero como persona afable y bondadosa, gran profesor, ferviente cristiano y excelente persona que predicaba con el ejemplo, todo ello lo corrobora mi padre que siempre me habló maravillas de este gran señor.

Aunque yo no he sido alumno directo del maestro Andrés, desde que tengo uso de razón he oído hablar de él en mi casa continuamente, no solo como persona si no de su manera de dar las clases, los gestos de colocar el sonido en máscara que hacía con la mano y con la voz.

Mi padre me enseñó a colocar el sonido de esa manera y ahora yo también lo enseño a mis alumnos y con los años de práctica enseñando he encontrado la manera de acortar el camino para llegar lo antes posible al objetivo final, y al igual que en todos los vídeos anteriores, puede observarse también en mis alumnos el denominador común de la escuela del maestro Andrés, el timbre diáfano y la proyección del sonido.

Angela Cayuela (soprano) Aria Butterfly

Patrik Tapiol (tenor)

Andreu Montiel (tenor) Violetas imperiales

En nuestro encuentro Cuellar & Bañó hablamos de muchas cosas, de la voz por supuesto, me habló largamente de mi padre el tenor de las marinas Fernando Bañó y de su simpatía con sus compañeros de aula en casa del maestro Andrés, sus bromas con sus compañeras sopranos, y cómo el maestro le reprendía y le hacía salir a cantar para que parase de armar bulla. El encuentro en Valencia con el maestro José Cuellar es para mí un esperado deseo que hacía mucho tiempo que tenía en mente y que finalmente se ha realizado, espero que nos veamos pronto de nuevo maestro Cuellar.

Fernando Bañó (tenor) canta: Fandanguillo / Salida de Marina / Brindis de Marina