Fernando Bañó Llorca - profesor de canto
La persona que desea estudiar canto conmigo, debe saber que yo enseño la colocación craneal en máscara (sinónimo de nasalidad) del maestro Francisco Andrés Romero (1887-1968), profesor valenciano de Alfredo Kraus, con quien mi padre estudió unos seis años con posterior gran éxito en su carrera lírica, y por supuesto enseño también el método de apoyo diafragmático e intercostal.
El método del Maestro Francisco Andrés Romero, es el método ya perdido de los grandes cantantes del siglo XIX e inicios del XX, citaré algunos ejemplos de tenores famosos y característicos en esta técnica de colocación craneal sinónimo de nasal:
1806-1896 Gilbert Louis Duprez, 1820-1889 Enrico Tamberlik, 1840–1912 Antonio Aramburo, 1844-1890 Julian Gayarre 1850-1905 Francesco Tamagno, 1853-1916 Francesco Marconi, 1858-1951 Agustarello Affre, 1860-1925 Fernando di Lucia, 1861-1923 Ernest Van Dyck, 1863-1933 Francisco Viñas, 1865-1943 Albert Vaguet, 1867-1928 Edmond Clément, 1870-1940 Alessandro Bonci, 1871-1948 Antonio Paoli, 1873-1921 Enrico Caruso, 1876 - 1949 Giovanni Zenatello, 1876-1929 Giuseppe Anselmi, 1882-1944 Dmitri Smirnov, 1884-1945 John McCormack, 1885-1969 Giovanni Martinelli, 1885-1952 Aureliano Pertile 1887-1974 Hipólito Làzaro, 1887-1976 Francesco Merli, 1889-1965 Tito Schipa, 1890-1973 Lauritz Melchior, 1890-1957 Beniamino Gigli, 1891-1948 Richard Tauber, 1891-1952 Antonio Cortis, 1892-1979 Giacomo Lauri-Volpi, 1892-1954 Miguel Villabella, 1897-1972 Helge Roswaenge, 1897-1984 Georges Thill, 1897-1938 Miguel Fleta, 1907-1979 Mario Filippeschi.
Esto es tan solo una pequeña selección de algunos de los más importantes y famosos tenores de finales del siglo XIX y principios del XX de los que se pueden escuchar grabaciones por internet.
Algunos tenores de principios del siglo XIX pertenecen a la transición técnica entre el registro agudo de voz de cabeza a pecho de los que naturalmente no tenemos grabaciones pero si de los subsiguientes, cuando el trabajo con los agudos de falsete a pecho ya estaban culturalmente admitidos y bien afianzados.
Todos estos cantantes nasalizaban su voz durante sus años de estudio para “impostar” su voz ARRIBA al igual que se aprecia en las muchas grabaciones de Alfredo Kraus que circulan por internet vocalizando con alumnos y compañeros de escenarios; y aunque todos mantienen su voz dentro de las fosas nasales luego durante el canto, el sonido no es nasal “NI DEBE SERLO”, simplemente será brillante, timbrado, squillante, alto y adentro, gracias a la inercia de las vocalizaciones “nasalizadas” durante su aprendizaje.
Mi padre me enseñó esa técnica de máscara, gracias a la cual como ya dije anteriormente, el gran Alfredo Kraus llegó a ser el primer tenor del mundo de su época. Alfredo Kraus estudió con el maestro Francisco Andrés Romero la verdadera técnica de colocación en máscara (nasalidad), haciendo tres días de clases semanales, subsiguientemente a las clases con la profesora rusa Galli Markoff de quien Kraus comentaba que de alguna manera esta profesora se enzarzaba demasiado en las cosas sencillas del canto ya que tenía una mente investigadora constante. Alfredo Kraus comenta que aprendió algo muy importante de ella, que fue el arte de analizar las partituras y como estudiarlas desde el punto de vista vocal.
Las clases con el Mtro. Andrés de Valencia fueron providenciales y determinantes en la posterior y exitosa carrera de Alfredo Kraus, puesto que el Mtro. Andrés poseía ya en esa época: método, práctica, destreza y experiencia en la enseñanza. Con el Mtro. Andrés, el joven tenor se reafirmó en los espectaculares agudos y comenta el propio Alfredo Kraus que el Mtro. Andrés era mucho más claro, pragmático y metódico en sus explicaciones sobre la técnica de la colocación que su anterior profesora. Palabras de Alfredo Kraus: “El Mtro. Andrés me hizo adelantar una barbaridad en el aprendizaje del canto”
Comentarios de Arturo Reverter en su libro: “Alfredo Kraus una Concepción del Canto” de 2010: “Con el realizaba tres clases semanales de media hora bien aprovechada y rigurosa, en donde la casi totalidad de la clase era para vocalizar (impostar, nasalizar) y al final cantaba una sola aria. La voz estaba bien enfocada e iba asentándose.
Luego durante su estancia en Italia la Sra. Llopart supo recoger el fruto de todo ese trabajo anterior y encauzarlo inteligentemente y no mancillarlo, a pesar de que le exhortaba a cantar de lírico, posiblemente por el sonido oscuro y varonil que era el sello del Mtro. Andrés hacia sus alumnos. En el inmediato debut de Alfredo Kraus después de su trabajo vocal reciente con el maestro Andrés, se puede reconocer en sus primeras grabaciones este sonido más lírico y profundo, más de tenor lírico, sé muy bien lo que digo puesto que mi padre cantó con él las famosas Francisquitas del año 1956 en el Teatro de la Zarzuela de Madrid y me comentaba que entonces Alfredo Kraus no ponía la boca “apaisada” ni su sonido era tan agudizado si no más varonil, sin embargo el “affondare” (profundizar) como posición laríngea del Mtro. Andrés, lo llevo en su forma de hacer toda su vida junto a sus características laríngeas naturales.
Desgraciadamente algunos de los alumnos directos del maestro Andrés, no enseñaron correctamente esa técnica y los alumnos de los alumnos tampoco, ya que casi todos omiten la REDONDEZ de las vocales en los altos, cosa que el maestro Andrés tenía MUY en cuenta.
(Obsérvese la cobertura y la redondez del sonido de mi padre en la subida al SI natural en este fragmento de marina)
COSTAS LAS DE LEVANTE (Marina) Fernando Bañó (tenor) padre
La redondez a la que me refiero sería equivalente a la COBERTURA de la técnica italiana, sin esta atención a ese mecanismo que se debe producir sobre la mitad del ámbito o rango de cada cuerda, la garganta se atasca y se estrecha la laringe en los agudos, quedando la voz constreñida y nasal y haciendo penoso el canto y la pérdida de calidad, cuerpo y sonoridad tímbrica en los graves.
La colocación en máscara puede ser muy peligrosa si se enseña mal, o no se tiene en cuenta la apertura de la garganta y el descenso de la laringe en los altos y agudos, por ese motivo yo alterno el trabajo de MASCARA con el método italiano de COBERTURA, que propugnaba tanto el gran tenor Luciano Pavarotti y su profesor Arrigo Pola.
(Obsérvese la redondez y oscurecimiento del sonido vocal del Sr. Alfredo Kraus en esta época de los inicios de su carrera en donde todavía conservaba las pautas de redondez vocal del Mtro. Francisco Andrés Romero)
Alfredo Kraus en “Pepita Jiménez” (1964)
Según mi padre me contaba, el maestro Andrés no hablaba de cobertura pero no dejaba a los alumnos ABRIR o chillar las notas altas y les hacía redondearlas y oscurecerlas, de hecho Alfredo Kraus cuando inició su carrera, varonizaba, redondeaba y profundizaba la voz mucho más que posteriormente, lo dice su biógrafo Eduardo Lucas Bueso y me lo explica mi padre, ya que cantaron juntos en el Teatro de la Zarzuela de Madrid en España (Spain) en 1956.
El maestro Francisco Andrés Romero como ya dije antes, fue quizás el último gran impostador de la historia del canto y gracias a él y a este método de “nasalización” (voz en máscara) y de colocación de la voz, Alfredo Kraus quedará en la historia como el mejor tenor de ópera del siglo XX.
En mis clases estoy muy atento a que los alumnos y alumnas mantengan el sonido AFFONDATO y varonil, (laringe baja o sonido profundo) y a la vez estoy atento a su colocación craneal o su sinónimo que es: nasalización. En otras palabras trato de evitar el sonido estridente, nasal (en el canto) y “escañado” que conlleva apretar y elevar la garganta y que son los causantes del cansancio en el canto así como la pérdida de los graves y que además imposibilita la proyección del sonido, anulando los decibelios de la voz en un gran teatro y hasta puede acabar destruyéndola.
MIS EXPERIENCIAS
Yo he vivido el canto desde el vientre de mi madre; de muy pequeñito iba de tournée con mis padres y dormía en el camerino hasta que se acababa la función. Desde que tengo uso de razón he oído hablar de canto, de colocación de la voz, de estilo, de estilismo escénico o de clase escénica, estética vocal y distinción actoral en un cantante lírico, que mi padre cuidaba siempre mucho en su propia persona.
Mi padre después de tener muy malas experiencias vocales con dos profesores de conservatorio, fue alumno durante seis años del maestro Francisco Andrés Romero, quien lo rehabilitó y salvó su vida vocal y artística. Don Francisco Andrés Romero fue profesor también de muchos grandes cantantes del momento y de Alfredo Kraus como ya he dicho anteriormente, y fue quizás el mejor maestro de canto de aquella época. Mi padre luego me impostó la voz a mí con su técnica, con la técnica de la “i” (técnica de máscara o nasalidad) del maestro Francisco Andrés Romero.
CANTA: Fernando Bañó (tenor) HIJO
Sobre mis 20 años me trasladé a Madrid para seguir mis estudios, me dijeron que tenía la voz nasal e intentaron quitarme esa posición vocal, a partir de ese momento mi voz sufrió una progresiva y negativa involución hasta que dejé mi carrera forzosamente, mi padre entonces no me pudo ayudar ya que una cosa es ser impostador y otra cosa ser rehabilitador.
A pesar de todo, llegue a pisar exitosamente muchos escenarios nacionales e internacionales, tuve premios en concursos de canto y fui contratado por los más influyentes managers del momento con contrato exclusivo como Carlos Caballè & Luis Andreu agentes de José Carreras, Montserrat Caballè, Joan Pons, entre muchos otros importantes cantantes.
DON PASQUALE ARIA DE TENOR (Donizetti) Fernando Bañó (tenor) HIJO
Cuando comprendí que mi voz no podía seguir con roles protagonistas, busqué ayuda técnica en España sin éxito, luego también en Italia con poca fortuna, pues no encontré un maestro rehabilitador como encontró mi padre en su época. No quise que mi carrera estuviese fundada sobre comprimarios exclusivamente, así que la dejé definitivamente y por pura cabezonería de alcoyano (*) surgió la investigación vocal y por consecuencia la enseñanza.
(*) Refrán "tienes más moral que el Alcoyano"
Y lo de la moral viene porque parece que es algo que está en los genes de los alcoyanos que son mis queridos paisanos.
En 1944 el equipo de fútbol de El Alcoyano, de mi ciudad de nacimiento, iba perdiendo 7-1 ante un equipo catalán “El Español”, en el estadio de las Corts (Barcelona).
Los catalanes (apodados periquitos) arrasaban en goles, algo totalmente irremontable, el colegiado optó por no alargar el sufrimiento del equipo alcoyano y decretó el fin del partido, a falta de dos minutos para su conclusión, pero aun así, viendo que no se podía hacer nada, los futbolistas alcoyanos (apodados albiazules) protestaron de forma airada y le pidieron al árbitro una prórroga para ver si conseguían al menos empatar… ja ja ja ja ja…
Yo también llevado por mi cabezonería de alcoyano, me dedique a investigar con ahínco, que es lo que me había llevado a perder la colocación que mi padre me había enseñado y evaluar las diferentes técnicas de enseñanza y sus ramificaciones reales y ficticias, llegando a conclusiones verdaderamente sorprendentes, hasta que toda esa investigación e información, se convirtió en mi primer libro “LA ANTITÉCNICA” que se ha expandido por todo el mundo, y a mí me convirtió en rehabilitador vocal.
MIS TRABAJOS DE REHABILITACIÓN VOCAL:
MI TRABAJO COMO REORIENTACIÓN VOCAL:
Ese afán investigador, no ha cesado, y aparte de mi nuevo libro “LA ANTITÉCNICA 2ª PARTE” está en marcha una nueva obra titulada: “HISTORIA DE LA TÉCNICA VOCAL” que analizará la evolución de los métodos vocales desde tiempos inmemoriales.
Mi profesión forzosa como profesor de canto durante más de tres décadas, me ha dado muchas satisfacciones y felicidad profesional, y he llegado a la conclusión de que ese era mi DESTINO ASTRAL desde el principio de mi existencia, y el destino es el que finalmente te indica tu camino en la vida.
COMO NACE UN PROFESOR DE CANTO
En la historia de la enseñanza del canto, abundan famosos profesores con alumnos notables que no fueron cantantes, y que nunca sintieron las buenas ni las malas experiencias vocales en su propia garganta, generalmente fueron pianistas de repertorio lírico (repertoristas o repasadores), y sobre todo entusiastas del canto, que aprendieron el método vocal desde muy jóvenes, en las aulas de profesores de canto, como acompañantes pianísticos de sus alumnos.
Los más inteligentes entendieron la mecánica vocal, y luego se sintieron capaces de enseñarla. Todos estos osados personajes (no cantantes), fueron muy criticados en sus inicios, por atreverse a enseñar el canto sin haber cantado, hasta que acabaron demostrando su valía.
Hay cientos de ellos en todas las épocas de la historia de la ópera, y muchos formaron a alumnos que llegaron a ser famosos, algunos de los ejemplos más universales son: el Mtro. Nicola Porpora y su máximo alumno Farinelli entre otros grandes, el Mtro. Campogaliani con Mirella Freni y Luciano Pavarotti entre otros, el Mtro. Francisco Andrés Romero con Alfredo Kraus, mi padre Fernando Bañó, el tenor Francisco Ortíz y la mezzo Cora Raga entre otros también, el Mtro. Jaime Francisco Puig profesor de Jaime Aragall, José Carreras, Vicente Sardinero entre otros etc.
Más difícil todavía es imponerse como profesor de canto, para alguien que ha interrumpido su carrera por problemas de voz, siempre sale a colación la misma frase: “que va a enseñar ese si no ha hecho apenas carrera…” Cuando personas ajenas al canto me preguntan porque no seguí cantando, el camino más rápido para que lo entiendan, es explicarle mi metáfora futbolística del hipotético jugador de fútbol que tenía por delante un gran futuro, y que a causa de la típica lesión grave, tuvo que dedicarse al entrenamiento; esto ha sucedido cientos de veces en la historia del futbol, y sucede también mucho más en el mundo del canto, unos desgraciadamente se lesionan las rodillas, y otros se lesionan la garganta.
Aunque el canto y su enseñanza, no es una ciencia exacta como también sucede con la medicina, me atrevería a decir que el mejor profesor de canto, es sin duda el que ha pasado por las típicas peripecias vocales. El cantante de facultades naturales, que no ha sufrido los rigores del camino vocal, posteriormente enseñando no suele ser un profesor paciente y comprensivo con el proceso vocal, puesto que este tipo de voces, suelen poseer el don divino sin apenas casi estudios, y consideran poco inteligentes a los que no ejecutan sus deseos al momento, o en pocas clases.
Fernando Bañó Llorca